los pinches puercos otra vez

Otra vez los puercos. Aferrados tras su uniforme de prepotencia.  Quién no se ha topado con los cochinos. Quién no ha sentido el nervio correr al paso de la noche al ver la trompa amenanzante.

Peor me siento cuando escucho a un político de mierda hablar orgullosamente de los corrales y los chiqueros. Como si fueran honorables sus labores apestosas tienen el descaro de pregonar cierto orgullo por pertencer al ruin atascadero.

Es una ofensa. Un insulto a cada uno de nosotrxs. La guerra ya está aquí y la vivimos cotidianamente, se libra en cada esquina. Me emputa está sensación. Nadie venga a esta ciudad de plomo si lo que busca es paz, felicidad, amor, calma, plenitud, libertad.

Qué podemos hacer los que estamos aquí para sacar la mejor partida de esta situación de mierda que amenaza con seguir y ponerse aún más culera? Si al menos esta condición donde ya nadie sabe qué pedo nos otorgará pequeñas mayores libertades sería menos insoportable.

Pero ni un porro puede unx fumarse a gusto. Los puercos te agandallan antes de abandonarte en una esquina sin dinero ya, ni cartera, ni celular, con la rabia ultrajada.

Pinches puercos. Habrá que arreglárselas. A cómo de lugar para seguir viviendo, pese a todo este desmadre. Saluddddddddd¡¡¡¡ y toke y rolll¡¡¡¡